MARZO 2012

Llevamos ya en nuestra mochila todos los recuerdos que nos dejaron los momentos por Laos, desde un principio quisimos darle un toque diferente a la visita a este país, y para cruzar la frontera y llegar hasta Luang Pra Bang ( primera parada ) decidimos ir en barco, un trayecto que duraría dos días y una noche en un pequeño pueblo a orillas del río, pensábamos que podían ser excesivos pero luego resultarían ser encantadores! Pudimos hacer amistades con numerosos viajeros y acompañar las conversaciones con vino de sudáfrica!

Llegamos al destino y disfrutamos de sus numerosos templos como de unas cataratas increíbles, todo ello comentándolo con las numerosas amistades que se forjaron en el barco y posteriormente se intentaron mantener por algunos de los bares del centro de la ciudad donde se establecia el night market y como si se tratase del ayuntamiento de la ciudad, todos íbamos allí como centro de reunión.

Ya tocaba cambiar de ciudad y eso conllevaba "disfrutar" de un lindo recorrido por lo alto de las montañas que dejaban los desfiladeros a ambos lados del mini bus ,los pueblos se sucedían cada vez con menos frecuencia y "la vida" pasaba a ser solamente "naturaleza". El momento lo tenía todo... incluído un motor quemado!! que nos dejó tirados en medio de la nada para así poder saborear un poco más el bonito paisaje!!!

Solucionado el problema, continuamos la marcha hasta encontrarnos de bruces con la pobreza; numerosos niños caminando por el perfil de las carreteras de tierra y barro, sin zapatillas, sin camiseta, casi desnudos y refugiándose en casitas de bambú que a simple vista se notaba su fragilidad... y perdidos en lo alto de las montañas. Y nosotros allí subidos viendo la escena como si de una escena cinematográfiva se tratase a través de los cristales del bus, nosotros mientras tanto, preocupándonos de la incómoda posición para poder conciliar el sueño, o achacando la falta de comida para poder saciar el hambre,etc...Puedo imaginar que los numerosos autobuses repletos de turistas tendrán las "mismas curiosidades" que nosotros. Pero si te fijabas un rato podías ver a una niña sujetando su enorme falda ( de su madre ) con su mano a la altura del hombro para no caerse con ella, o un niño agarrando una camiseta para quedársela con todas sus fuerzas, niños llevando carretillas repleta de piedras,etc...Quizás si uno se fijaba en eso y mucho más, era muy fácil perder el sueño y creérse que estaba soñando! Por que la escena era increíble!!!!

Disfrutamos lo que pudimos de Vang Vieng y nos encaminamos a Vietnam.